jueves, 12 de abril de 2012

El Caminante Peregrino III de Portomarín a Paláis de Rei


El tiempo sigue lluvioso, frío (2 C.), niebla y algunas heladas, los habitantes de Galicia contentos, desde noviembre no llovía mucho, la sequía los tenía bastante preocupados. Se pronostican lluvias para los próximos días.
En Sarria tenían mercado ese mañana y ya desde tempranas horas se veía a los parroquianos esperando que terminaran de instalar los kioscos para comenzar sus compras. Mucho movimiento de peregrinos.
Comencé a caminar con niebla, la cual se fue paulatinamente desapareciendo en la subida que se encuentra a la salida de Portomarín rumbo a  Gonzar, que es un recorrido de 9 Km.,  con desnivel de 200 ms. , (pasando de la cota 350 a 551msnm.




Allí vi muchos jóvenes que irradiaban entusiasmo y todo el tiempo comentando entre ellos de sus experiencias en el camino. Al lado izquierdo del camino podemos observar unos pinares que nos irán acompañando , pasando por Toxibo (mojón 85,5km). Vamos casi todo el tiempo paralelo a la carretera  LU-633. Me pare a desayunar en el Km 82, Casa García, tiene además un restaurante y es también un albergue, se veía muy bien.
Pasado Gonzar, el camino continúa rumbo a Castromayor, con una fuerte subida hasta llegar a la población de  Hospital de la Cruz ( La salida rumbo a Ventas de Narón debería estar mejor señalizada). La cota más alta 700 ms la encontramos en Ventas de Narón, de allí  se baja, entre pinares  a Ligonde y Airexe,  (Valdría la pena desviarse o luego visitar en coche la población de Vilar de Donas para  admirar la Iglesia de el Salvador, muy vinculada al Camino de Santiago y la más representativa del estilo románico de la zona, formaba parte del Monasterio  de Vilar de Donas, el cual era sólo para mujeres, (Donas significa mujeres en Gallego) para entonces llegar a Abenostre , O Rosario, lugar en que los peregrinos hacían un alto para rezar un rosario y de allí a Paláis de Rei.

En esta etapa se sigue disfrutando de la campiña gallega, sus pinares y bosques de castaños. La amabilidad del Gallego se hace sentir, siempre amable y pendiente del Peregrino.
Ya escampo en los tramos finales de la etapa y llegue a Paláis de Rei, me detuve en la Pensión Vilariño ( Ya la conocí días anteriores cuando fuimos a buscar a mi cuñada que se había accidentado debido a una tendinitis),  aproveché  para tomar un refrigerio, el biscocho que venden allí es delicioso y dar por terminada la etapa de hoy.